El tema es muy transversal porque la relación urbano/rural tiene, como sabrán y comprobaremos más adelante, un grande valor social y ambiental y es totalmente dependiente de las relaciones de poder (clases urbanas y rurales, Norte-Sur del mundo, articulación de los grupos de poder económico) y del modelo de producción y consumo.
El tema pone además en juego la urbanística, los estilos de vida, la relación entre hombre y naturaleza, etc.
Teniendo en cuenta su transversalidad, es posible que:
Sea objeto de momentos específicos en el programa del congreso (keynotes speeches, debates, exibiciones, foros).
A nivel de ponencias, sin embargo, que no sea tratado como un eje temático independiente, pero que sea presente como tema de fondo en todos los nichos temáticos del congreso.
Ciudad vs. Campo. Las causas
El fenómeno que motiva la elección de este tema es la creciente cuota de población mundial que vive en las ciudades y los graves problemas de los entornos extraurbanos y del mundo rural.
Las causas de este fenómeno son socio-económicas, ecológicas y culturales.
1. Socio-económicas, ya que el trabajo agrícola es poco remunerado. En la ciudad se espera encontrar más oportunidades de escapar de la pobreza y más probabilidades de encontrar un "ascensor social".
2. Ecológicas, porque el cambio climático (con su propio conjunto de cambios en los ciclos estacionales, de migraciones de especies animales y vegetales, de acentuación de los fenómenos extremos como la sequía y la desertificación por un lado y las inundaciones y deslizamientos de tierra por el otro) causan pérdida de suelo fértil y un número creciente de refugiados ambientales que incrementan la migración temporal o permanente dentro de los países y entre países. El cambio climático se suma a una situación ya comprometida por la deforestación, la destrucción de los hábitat naturales, la contaminación, el empobrecimiento del suelo debido a la química y a la mecanización, al uso de suelo para las infraestructuras, viviendas, zonas de entretenimiento (por ejemplo campos de golf), etc. Por otro lado, el propio sector agrícola es responsable de la contaminación del agua, del suelo (como nos ha enseñado hace 50 años Rachel Carson con Primavera Silenciosa), de los alimentos y de una cuota significativa de las emisiones de CO2.